Todo lo que Buddha enseñó está incluido en estas cuatro verdades.
Fue en el momento de su Iluminación, hace más de 2.500 años, que Buddha realizó estas cuatro Nobles Verdades.
Estas verdades son eternas, siempre existen, independientemente de la existencia de Buddha. No son creadas por Buddha, sino que él las descubrió.
No hay nada capaz de ser conocido fuera de estas cuatro verdades.
Buddha utilizó el idioma pali para comunicar sus enseñanzas. El pali fue el idioma de la región de Magadha, en el norte de la India, donde Buddha predicó durante 45 años después de la Iluminación.
Después de la muerte de Buddha, sus discípulos preservaron sus enseñanzas oralmente durante 5 siglos, aproximadamente.
En el primer siglo, antes de la era cristiana, las enseñanzas se registraron en hojas de palma, en la isla de Sri Lanka.
Las enseñanzas que poseemos hoy en día provienen de esta transmisión sin interrupción, a través de los siglos, por parte de sus discípulos.
La verdad, en el budismo, no necesariamente debe ser algo sublime, bueno o noble. Por ejemplo, el deseo, el enojo, el odio, algunos de los estados mentales, son verdades de acuerdo con las enseñanzas del Buddha.
Buddha fue el primero que descubrió estas cuatro verdades y las reveló al mundo.
La realización de estas verdades conduce al estado de noble, hace que uno sea noble.
Entonces, se denominan verdades porque son hechos reales e inalterables. Y se denominan nobles porque, a pesar de que fueron descubiertas por Buddha, una noble persona, la realización de estas verdades conduce a la persona al estado de noble.
Las 4 Nobles Verdades son:
1. LA NOBLE VERDAD DEL SUFRIMIENTO (dukkha-ariya-sacca)
La primera Noble Verdad es dukkha; La naturaleza de la vida es sufrimiento.
En el primer discurso, después de su iluminación, Buddha dijo lo siguiente con relación a esta primera verdad: "Ésta, oh monjes, es la Noble Verdad del Sufrimiento. El nacimiento es sufrimiento, la vejez es sufrimiento, la enfermedad es sufrimiento, la muerte es sufrimiento, asociarse con lo que no se desea es sufrimiento, separarse de lo que se desea es sufrimiento, no alcanzar lo que se desea es sufrimiento. En breve, los cinco agregados de la adherencia son sufrimiento".
El nacimiento se define en el budismo como el primer momento en una existencia particular. En el caso de los seres humanos es el momento de concepción.
El nacimiento es sufrimiento debido a que es la base de todo lo que inevitablemente sigue: la vejez, la enfermedad y la muerte.
Que la vejez es sufrimiento no es difícil de comprender. Cuando envejecemos nuestras facultades declinan, somos más proclives a la enfermedad, menos independientes, etc.
La enfermedad es sufrimiento. Cuando nos enfermamos experimentamos sensaciones corporales desagradables y como resultado a veces también sufrimiento mental en la forma de depresión, etc. Y morir es sufrimiento.
Buddha dice también que asociarse con lo que no se quiere es sufrimiento, asociarse con personas o cosas que nos son desagradables. Separarse de lo que se quiere es sufrimiento; separarnos de lo que poseemos, cosas o seres, separarnos de nuestros seres queridos, familiares, amigos temporal o permanentemente es sufrimiento. No alcanzar lo que se desea es sufrimiento.
A veces deseamos poseer algo, material o espiritual, pero debido a las circunstancias de la vida no lo podemos obtener. Esta frustración de no obtener lo que deseamos es sufrimiento. No es difícil comprender que todas estas condiciones de la vida son sufrimiento.
Buddha finaliza la exposición de la primera verdad diciendo: "En breve, los cinco agregados de la adherencia son sufrimiento". Los cinco agregados son todo lo que nosotros somos.
Los cinco agregados son:
1. El agregado de la materialidad
2. El agregado de la sensación
3. El agregado de la percepción
4. El agregado de las formaciones
5. El agregado de la consciencia
Es importante comprender que cuando Buddha expone la verdad del sufrimiento primero utiliza términos convencionales tales como el nacimiento, la vejez, la muerte, etc. Sin embargo, Buddha finaliza su exposición utilizando lenguaje filosófico, el lenguaje de las realidades últimas. Y es esta dimensión del término 'dukkha', sufrimiento, la que es más difícil de comprender y aceptar. Esto es así porque para ello es necesario una profunda experiencia, sabiduría, acerca de la naturaleza de los fenómenos. Sólo cuando uno ha experimentado los fenómenos de acuerdo con su naturaleza real, es posible concluir que los cinco agregados de la adherencia son sufrimiento.
Cuando Buddha dice que los cinco agregados de la adherencia son sufrimiento se está refiriendo al sufrimiento de lo condicionado, al sufrimiento de aquello que es el producto de causas. Los cinco agregados son producto de causas, son condicionados. Y todo aquello que es condicionado es sufrimiento.
De acuerdo al budismo todo lo condicionado está sujeto al surgir y al cesar.
Y es este continuo surgir y cesar de los cinco agregados lo que es sufrimiento.
2. LA NOBLE VERDAD DEL ORIGEN DEL SUFRIMIENTO (dukkha-samudaya-ariya-sacca)
La segunda Noble Verdad es el origen de dukkha; El deseo o "sed de vivir" acompañado de todas las pasiones y apegos.
Esto es lo que Buddha dice en el primer discurso: "Ésta, oh monjes, es la Noble Verdad del Origen del Sufrimiento. Es el deseo que produce nuevos renacimientos, que acompañado con placer y pasión encuentra siempre nuevo deleite, ahora aquí, ahora allí. Es decir, el deseo por los placeres sensuales, el deseo por la existencia y el deseo por la no-existencia".
De acuerdo con el budismo el sufrimiento es debido al deseo y no a la disposición de un ser supremo. El budismo es único entre las religiones al declarar al deseo como la causa del sufrimiento.
El deseo por los placeres sensuales significa deseo por los objetos de los sentidos, tales como objetos visibles, audibles, olfativos, gustativos, tangibles y mentales.
El deseo por la existencia significa deseo por la continuación de la existencia en el ciclo de reencarnaciones; renacimientos y muertes (samsara).
El deseo por la no-existencia significa deseo por la aniquilación; es deseo asociado con la concepción errónea de que todo termina en el momento de la muerte.
El deseo de acuerdo al budismo es una fuerza tremenda que tiene la potencialidad de producir renacimientos una y otra vez. Es debido a este deseo que los seres realizan acciones (karma) buenas o malas. Y cuando hay acciones acumuladas, hay efectos (vipaka). Y siempre y cuando exista esta acumulación de acciones habrá renacimientos en el futuro. Por lo tanto, el origen del sufrimiento presente es el karma que realizamos en el pasado.
De acuerdo con la Doctrina del Origen Condicionado el deseo está condicionado por la sensación (agradable, desagradable o neutral). Cuando hay sensación agradable uno desea poseerla, cuando hay sensación desagradable uno desea su opuesto. La sensación neutral es igual que la agradable. Y cuando hay deseo hay adherencia (upadana), una forma más intensa de deseo. Cuando hay adherencia hay existencia (karma). Cuando hay existencia hay renacimiento. Y cuando hay renacimiento hay vejez y muerte.
Hay otra forma más gráfica de explicar esta segunda verdad. Cuando uno tiene apego a algo o a alguien y lo pierde, uno sufre. El sufrimiento que uno experimenta no es debido a la pérdida sino al apego que uno tiene hacia este algo o alguien.
3. LA NOBLE VERDAD DE LA CESACIÓN DEL SUFRIMIENTO (dukkha-nirodha-ariya-sacca)
La tercera Noble Verdad es la cesación de dukkha; Alcanzar el Nirvana, la Verdad absoluta, la Realidad última.
La cesación del sufrimiento es la erradicación de las impurezas mentales.
Sólo cuando uno ha erradicado las impurezas de la mente uno ha puesto fin al sufrimiento.
Buddha dice lo siguiente: "Ésta, oh monjes, es la Noble Verdad de la Cesación del Sufrimiento. Es la total extinción y cesación de ese mismo deseo, su abandono, su descarte, liberarse del mismo, no su dependencia".
Nirvana es un término pali que es mejor dejarlo sin traducir porque es imposible encontrar un equivalente en nuestra lengua.
El Nirvana es el objeto de ciertos tipos de conciencias. Hay ciertos tipos de conciencias que tienen la habilidad de tomar Nirvana como objeto. Estos tipos de conciencias se denominan conciencias del sendero y fruición.
Cuando una de las conciencias del sendero toma el Nirvana como objeto se produce la erradicación de las impurezas mentales. Esta erradicación es gradual. Primero se erradican las impurezas más bastas como la concepción errónea y la duda.
Después se erradican otras impurezas como el enojo, la vanidad, la agitación, etc.
De acuerdo al budismo, el deseo o apego, es decir la segunda noble verdad, es una de las impurezas a ser erradicadas. Cuando la impureza del deseo es erradicada, se dice que uno ha realizado la cesación del sufrimiento.
4. LA NOBLE VERDAD DEL SENDERO QUE CONDUCE A LA CESACIÓN DEL SUFRIMIENTO (dukkha-nirodha-gamini-patipadaariya-sacca)
La cuarta Noble Verdad es el Sendero que conduce al cese del sufrimiento y a la experiencia del Nirvana.
La cuarta Noble Verdad también se denomina el Camino Medio u Óctuplo Noble Sendero.
El Óctuplo Noble Sendero es la práctica que uno debe seguir para alcanzar la cesación del sufrimiento.
Es óctuplo porque posee ocho componentes.
Buddha dice lo siguiente: "Ésta, oh monjes, es la Noble Verdad del Sendero que conduce a la Cesación del Sufrimiento. Simplemente este Óctuplo Noble Sendero; es decir, Recto Entendimiento, Recto Pensamiento, Recto Lenguaje, Recta Acción, Recta Vida, Recto Esfuerzo, Recta Atención Completa y Recta Concentración".
La esencia de los millares de discursos en los que el Buda explicó su enseñanza de distintas maneras, está contenida en Las Cuatro Nobles Verdades y el Noble Óctuple Sendero.
Este Sendero comprendido en la cuarta Noble Verdad es el Sendero Medio, llamado así por evitar los dos extremos; tanto la búsqueda de la felicidad a través de los placeres sensuales, como la mortificación de uno mismo.
Este Sendero Medio es llamado "El Noble Óctuple Sendero", ya que consta de ocho factores, que son:
1. Recta comprensión (samina ditthi)
2. Recto pensamiento (samma sankappa)
3. Rectas palabras (samma vaca)
4. Recta acción (samma Kammanta)
5. Rectos medios de vida (samma ajiva)
6. Recto esfuerzo (samma vayama)
7. Recta atención (samma sati)
8. Recta concentración (samma samadhi)
Estos ocho factores no son separados y deben desarrollarse simultáneamente, ya que todos ellos están estrechamente relacionados entre sí, y cada uno contribuye al cultivo de los otros.
Su finalidad es el desarrollo y perfeccionamiento de los tres principios capitales del adiestramiento y disciplina budistas:
-La sabiduría (pañna): La Sabiduría implica la Recta Comprensión y el Recto Pensamiento.
-La Recta Comprensión es la comprensión de las cuatro Nobles Verdades. Es la comprensión de la ley de la causalidad. Es la comprensión de la impermanencia.
-El Recto Pensamiento es pensar con desapego, amor, renunciamiento y no violencia, esto es, con sabiduría. Es evitar pensamientos de apego, malevolencia, odio y violencia, esto es, evitando la ignorancia.
-La conducta ética (sila): La Conducta ética implica: la Recta Palabra, la Recta Acción y los Rectos Medios de Vida.
La conducta ética (sila) está basada en la vasta concepción del amor universal y la compasión hacia todos los seres vivientes, que constituye el fundamento de la enseñanza del Buda.
-La Recta Palabra es abstenerse de emplear formas de lenguaje erróneas y perniciosas, de hablar negligentemente, de mentir, difamar, calumniar o dañar a otros, y cultivar las palabras amistosas, benévolas, agradables, dulces, significativas y útiles.
-La Recta Acción es cultivar una conducta moral honorable y pacífica, absteniéndose de matar, robar, relaciones sexuales ilegítimas y llevar a cabo tratos deshonestos.
-Los Rectos Medios de vida es ganarse la vida de forma honorable, irreprochable e inofensiva, evitando cualquier profesión que pueda ser nociva de alguna manera para otros seres vivientes.
-La disciplina mental (samadhi): La disciplina mental incluye: el Recto Esfuerzo, la Recta Atención y la Recta Concentración.
-El Recto Esfuerzo implica los cuatro siguientes esfuerzos:
1. Impedir el surgimiento de pensamientos malos.
2. Apartar los pensamientos malos ya surgidos en la mente.
3. Cultivar el surgimiento de los buenos pensamientos.
4. Mantener los buenos pensamientos ya surgidos. Cultivar con atención el Dhamma.
-La Recta Atención implica los Cuatro Estados de Atención Mental:
1. Prestar diligente atención al cuerpo.
2. Prestar diligente atención a las sensaciones y las emociones.
3. Prestar diligente atención a las actividades de la mente.
4. Prestar diligente atención a las ideas pensamientos, concepciones y cosas (dhamma).
-La Recta Concentración es la disciplina que nos conduce a las cuatro etapas de dhyana, o absorción, en la primera etapa se abandonan los deseos y pensamientos apasionados e impuros, en la segunda, ya desaparecidas las actividades mentales, se desarrolla la tranquilidad y la "fijación unificadora de la mente", en la tercera surge la ecuanimidad consciente y en la cuarta desaparecen todas las sensaciones, tanto de dicha como de desdicha, de alegría y de pesar, permaneciendo en un estado de ecuanimidad y lucidez mental.
Este Noble Óctuple Sendero puede ser seguido, practicado y desarrollado por cada individuo. Es disciplina corporal, verbal y mental. Se trata de un Sendero que conduce a la aprehensión de la Realidad última, al logro de la liberación, de la felicidad y la paz, mediante el autodesarrollo moral, espiritual e intelectual.
En el Visuddhi-Magga (El Camino de la Purificación) del Venerable Buddhaghosa se compara a la verdad del sufrimiento con una enfermedad, la verdad del origen del sufrimiento con la causa de la enfermedad, la verdad de la cesación del sufrimiento con la cura de la enfermedad y la verdad del sendero que conduce a la cesación del sufrimiento con la medicina.
Bhikkhu Nandisena